miércoles, 30 de noviembre de 2011

Educacio para la ciudadania

Desde que, en el año 2004, el PSOE introdujo en el currículo escolar el conjunto de asignaturas de Educación para la ciudadanía, miles de familias se han enfrentado al adoctrinamiento de Estado, en una batalla desigual en la que parecían tener todo en contra. De hecho, los objetores a EpC se han topado con la incomprensión y la resistencia de las administraciones escolares, desde el Gobierno hasta muchos claustros, pasando por la Inspección educativa, los Gobiernos de las Comunidades Autónomas (tanto las gobernadas por el PSOE como las del PP), los sindicatos, etc. Pero, lejos de arredrarse ante las injurias, amenazas y coacciones de las que han sido objeto, las familias objetoras a EpC han mantenido la defensa de sus derechos y ahora ven recompensado, en buena medida, su esfuerzo Aunque de momento sólo se trata de una promesa electoral, y a pesar de que, para muchos, la asignatura propuesta por el PP sería innecesaria, porque esos contenidos ya se daban antes de forma transversal, a través de materias como Conocimiento del medio o Ciencias Sociales, el hecho de que los populares se comprometan a retirar EpC ya supone, no la victoria definitiva, pero sí un gran logro de los objetores Habrá que estar atentos para que, si llega finalmente a implantarse una asignatura que sustituya a EpC, sus contenidos sean objetivos y estén libres de cualquier posibilidad de adoctrinamiento. Sea como sea, y con el escenario de una nueva legislatura en el horizonte, la lucha de los padres objetores en la defensa de sus derechos y de los derechos de sus hijos ha demostrado que ser firme y coherente es rentable.

viernes, 25 de noviembre de 2011

fin a la violencia contra las mujeres

Sí, en Europa también. La violencia contra las mujeres es una plaga en países ricos y pobres: afecta a una de cada tres en el mundo.Quiero que la gente piense que esta mujer podría ser cualquiera, no se puede saber si es rica o pobre, podría ser tu hermana, una amiga o alguien que se sienta a tu lado en el autobús". Y sí, así es. . Los datos indican, por ejemplo, que Noruega rivaliza con sus vecinos nórdicos por el título mundial del país con mayor igualdad entre los sexos, pero parece, que esta equidad se acaba en la puerta del dormitorio. En Escandinavia la violencia sexual contra las mujeres comparte características propias de sociedades más desiguales: es demasiado habitual y rara vez se denuncia, y es aún más raro que quienes la cometen sean condenados. Una de cada 10 mujeres noruegas de más de 15 años ha sido violada Pero al menos el 80% de esas violaciones no llega a denunciarse oficialmente, y solo el 10% de los casos termina con una condena, según el Ministerio de Justicia.Hay que acabar con esto

jueves, 17 de noviembre de 2011

Me gusta Sevilla

Me gusta cuando amanece un día de niebla, de ambiente frío pero sensación cálida, un día de esos que invita a estar con tus amigos, con tu familia y disfrutar de cada segundo que te ofrece la vida. Me gusta escuchar el silencio de las calles, a esas horas intempestivas, por tempranas, de un sábado cualquiera cuando va llegando el invierno, cuando los tímidos rayos de sol quieren y no pueden llegar a aparecer, y la amenaza de la lluvia nos tiene a todas horas pendientes del cielo, ese cielo sevillano que por su color nos embelesa y nos cautiva, y nos dejamos hipnotizar por él sin preguntarnos nada más… Me gusta disfrutar de un Domingo otoñal, de un almuerzo inesperado en cualquier bar, de un cafelito en el cetro de la ciudad y charlar sin darme cuenta de que las agujas del reloj corren y se acerca de nuevo el Lunes. Me gusta disfrutar de mi ciudad, perderme en sus callejuelas del barrio de Santa Cruz, pasear por la calle Betis y seguir por Arenal y dejarme cautivar por el sabor añejo de sus tradiciones, de sus olores y dejarme llevar por mis recuerdos, imaginando volver al pasado e imaginando que el presente es diferente, que ese pasado que añoro con personas que añoro aún más disfrutan del momento conmigo. Me gusta no despertar del sueño, seguir viviendo sus encantos y dejarme llevar por ellos a cualquier sitio, porque cualquiera es bueno si estás en Sevilla.

viernes, 11 de noviembre de 2011

Debate televisado

En su primera comparecencia pública como líder de la oposición -que eso, y no otra cosa, fue, en realidad el llamado debate entre Rajoy y Rubalcaba-, el candidato socialista se ha revelado como un incisivo y agresivo periodista, dispuesto a pedir cuentas al reconocido nuevo Presidente del Gobierno. No sé ustedes, pero yo todavía me estoy preguntando qué tuvo que ver con un debate previo al voto en las urnas la hora y media larga para la que se montó un tinglado que nos ha costado a los españoles medio millón de euros largo; es decir, casi 100 millones de pesetas. No se me quita de la cabeza lo que habrían podido hacer los comedores de Cáritas con esos 100 millones de pesetas tan tristemente dilapidados en un momento, además, en el que por lo visto no hay dinero. Pues anda que si lo llega a haber... ¿Ustedes escucharon, a lo largo de la hora y media, que se mencionara, siquiera, la unidad de España? Yo, no. ¿Ustedes les vieron hablar del terrorismo, del 11-M? Yo, no. ¿Les escucharon, por casualidad, debatir sobre el imprescindible cambio de la Ley electoral, o sobre la inexistente política exterior de España? Yo, no. ¿Ustedes les oyeron hablar de la alucinante situación de la Justicia en España? Yo, no. ¿Y de la familia, o de la Educación para la ciudadanía oyeron algo? Yo, no. Pero ¿cómo es posible que los dos partidos mayoritarios se pongan de acuerdo en escamotear la mayoría de los verdaderos problemas de nuestra nación y se dediquen a hablar de lo mal que está la economía -que evidentemente lo está-, sin intentar siquiera una mínima aproximación a las causas y razones de que esté la economía como está? No pierdo la esperanza -ya saben ustedes que la esperanza es lo último que se pierde- de que algún día, en este desgraciado país llamado España, nuestros políticos sean dignos de tal nombre y aborden problemas verdaderos, en debates verdaderos Si quieren que les diga la verdad, hubo un momento, durante la inacabable hora y media, en el que sentí profunda vergüenza de que nada menos que un candidato a la Presidencia del Gobierno de España, el socialista - mencionara el aborto, el imposible matrimonio homosexual, y lo que él entiende por muerte digna como derechos. ¿Pero no se le caerá la cara de vergüenza? Llegó a afirmar expresamente, en un determinado momento, que «vivimos en un país con una tasa de criminalidad bastante aceptable». Oiga usted, no sabía yo que la criminalidad pudiera ser aceptable; siempre había creído que era absolutamente inaceptable. Dicen esas cosas porque les da todo igual. Es la dictadura del relativismo. No tienen criterios morales y les da igual el bien que el mal; es más, consideran el mal como un derecho y una conquista social; y, claro, así nos luce el pelo hasta económicamente. Si todo da igual, en un Juzgado como en una gasolinera.